Nunca más el humo
escuchará lo que escribo
con nebulosa confundida,
nunca más agujas
que permanezcan.
Ahora llaman horror a cualquier sangre,
entierro a qué muerte,
amor a lápidas,
versos a epitafios…
Escribir hoy en día
es volver a tu casa
cuando la noche parece de día
y los borrachos amas de casa
velando.
Y también nada de esto,
ya lo dice el cielo
cuando no nos asomamos a verlo
y no soporta sentirse silencio.
Poesía escrita en Requena el día 7 de Abril de 2.012
Germán Piqueras